Hospital Sant Joan de Déu Palma
Resumen de la historia del Hospital San Juan de Dios de Palma de Mallorca (HSJD)
En el verano de 2020, un joven aislado por COVID-19 en el hospital San Juan de Dios de Palma de Mallorca no sospecha, que allí, cerca del mar, hace 65 años se ubicaba un sanatorio infantil, creado por la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, una institución benéfica fundada en el siglo XVI en Granada (España) por Juan Ciudad, más tarde San Juan de Dios, con el objetivo de ofrecer asistencia sanitaria a la población más necesitada. Sus abuelos, sin embargo, sí recordarían a los Hermanos de la Orden pidiendo limosna en la ciudad de Palma para poder sustentar la atención sanitaria y escolarización de aquellos niños discapacitados y desfavorecidos en la Mallorca de la postguerra civil. Transformado en hospital en los años 70 y hasta la actualidad, ha ido adaptándose a las demandas sociales de su entorno, siendo además innovador en muchos aspectos médicos.
Los orígenes de sanatorio SJD de Palma se remontan a la primera década del siglo XX, fruto una de la donación filantrópica de los esposos Ramon Vallespir Garcias y Antonia Ferrà Aloy, constituida ante Notario el 20 de septiembre de 1909. La donación estaba destinada a la construcción y habilitación de un hospital para niños enfermos pobres y que se haría efectiva a la muerte de ambos cónyuges, que no ocurrió hasta 1917. Después de resolver toda una serie de cuestiones relacionadas con la donación y evaluar las diferentes localizaciones, en noviembre de 1927 los albaceas compraron un solar ubicado a cinco kilómetros de la capital, en una zona conocida como el Coll d’en Rabassa en la costa suroeste de la bahía de Palma, cerca de donde hoy está ubicado el aeropuerto Son Sant Joan de Palma de Mallorca. Esta ubicación no fue casual, si no que respondía a la necesidad de ubicar el sanatorio cerca de la costa, en contacto con la naturaleza y alejada de la urbe, acorde a las corrientes higienistas de la época que retomaban el uso de los agentes naturales ya presentes en la medicina antigua y resurgida a partir del siglo XIX.
Para el diseño del edificio se contactó con el afamado arquitecto catalán Don Sixto Illescas i Mirosa y su colega mallorquín Don José Alomar Bosch. El edificio tenía una disposición claramente sanatorial con una capacidad entre 40 y 50 camas infantiles. La orientación asistencial se establecía enfocada a la población vulnerable infantil afecta de procesos invalidantes de poliomielitis, parálisis cerebral infantil, tuberculosis ósea, mielomeningocele, etc., con gratuidad total para los ingresados. La inauguración tuvo lugar el 4 de diciembre de 1955. A partir de esta fecha se inició la actividad hospitalaria sustentada por un equipo de médicos especialistas apoyados por los Hermanos Hospitalarios que además de proveer las necesidades del hospital, colaboraban con su labor enfermera, participando en la actividad quirúrgica, en la rehabilitación y en los cuidados generales. En 1963 cuando se iniciaron las vacunaciones anti polio se aplicó la vacuna Salk en varias etapas de inmunización
Se dispuso también una Escuela Hospitalaria para los niños ingresados, proporcionando así una Primera Enseñanza equiparable a las escuelas oficiales. También se planificaron y pusieron en marcha las Escuelas Profesionales de Ayudantes Técnicos Sanitario (ATS) y de Fisioterapia para ir formando profesionales sanitarios
A partir del año 1968, toda vez que la poliomielitis iba decreciendo, se dispuso del primer Concierto con la Seguridad Social y con ello se dio pie a admitir además a pacientes adultos afectos de procesos invalidantes, potenciando la Cirugía Ortopédica y la Rehabilitación del adulto
A partir del año 1975 tuvo lugar la primera gran transformación del hospital, el cual paso a ser un hospital de Adultos orientado a la Cirugía Ortopédica, la Traumatología y la Rehabilitación con una capacidad de 75 camas. Destaca la amplia experiencia en implantologia articular
A partir de 1998 el Hospital inicia la atención geriátrica integral implantándose el primer Hospital de Día geriátrico con 15 plazas, la creación de la Unidad Geriátrica de Agudos, de Media Estancia, la Unidad de Ortogeriatria y la Unidad geriátrica de Larga Estancia. En dicha fase hay que señalar que también se pone en marcha la primera Unidad de Cirugía mayor/ menor ambulatoria de Cirugía Ortopédica de nuestra Comunidad Autónoma. En 2005 se coloca la primera piedra del nuevo edificio hospitalario y se inicia la nueva construcción que dará un nuevo aspecto a la clásica imagen sanatorial que todavía presentaba el hospital.
A partir de 2007 se trabaja intensamente con el objeto de lograr una plena integración del Hospital de San Juan de Dios en la Red Pública de Asistencia Sanitaria, lo cual se consigue a partir de 2013. A la vez se inaugura el nuevo pabellón hospitalario que dará cabida a consultas externas, servicios de Rx, gimnasio y hospitalización. Las camas pasan a 110, y se inicia la remodelación del edificio antiguo que al finalizar en 2014 llega a ofertar 150 camas hospitalarias. A la vez la orientación sanitaria se enfoca hacia favorecer en conjunto la autonomía de las personas, potenciando la neurorrehabilitacion, el daño neurológico central y medular, las curas paliativas, sin prescindir de los clásicos servicios de Cirugía Ortopédica, Traumatología y Rehabilitación motora. En 2015 la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios recibe el premio Princesa de Asturias de la Concordia. Con ocasión de la pandemia por Covid-19 el Hospital de San Juan de Dios, dentro de la Red de Hospitales Públicos, ha supuesto una colaboración imprescindible en el tratamiento de estos pacientes.
Joaquín Boronat Rom